La realidad del teletrabajo en Brasil
Manuel Martín Pino Estrada*
El teletrabajo es una alternativa de solución para resolver los congestionamientos en las grandes ciudades, pero la falta de una legislación y el prejuicio que aún se tiene e intereses económicos, hace que no se vean sus grandes beneficios, inclusive hay jueces que aún escriben sus sentencias a mano, pero felizmente hay otros que usan las nuevas tecnologías de la información para mejorar su trabajo.
El teletrabajo es una forma de trabajo autónoma o subordinada, que permite trabajar a distancia usando antiguas o nuevas formas de comunicación y telecomunicación, incluyendo la internet y los mundos virtuales. Por este motivo implica un cambio de paradigmas, pues al final de todo, el trabajador no va al trabajo y si el trabajo va al trabajador, teniendo consecuencias interesantes en las empresas y para quien trabaja de manera Independiente sin subordinación.
Vestir el terno, enfrentar el tráfico de carros, llegar puntualmente, almorzar fuera de casa y concentrarse en medio de ruidos y charlas de los colegas de trabajo. Estas situaciones cotidianas de quien trabaja en empresas ya cambió para más de 10,6 millones de brasileños, que hoy se aprovechan de la libertad de trabajar en el ambiente agradable de la propia casa.
Esta tendencia comienza a ganar simpatía de los brasileños con la promesa de reducción de costos de la corporación y aumento de la productividad de los empleados. Las empresas que trabajan con tecnología y producción creativa son las más abiertas para esta modalidad. Las multinacionales Cisco, IBM y Ernest y Young, por ejemplo, adoptan el sistema y economizan en espacio, equipos y transporte.
Sus colaboradores permanecen como empleados contratados, pero no necesitan desplazarse diariamente a la oficina, economizan tiempo, flexibilizan los horários, reducen el nível de tensión y equilibran mejor el trabajo con la vida familiar y social.
En casa, el trabajador produce hasta 30% más que en el ambiente corporativo, y más allá de los benefícios que ésto trae para la empresa y para el empleado, inclusive disminuye congestionamientos en las calles y avenidas y ayuda el médio ambiente.
Tantas ventajas para ambos lados de la relación de trabajo vienen acompañadas de algunos detalles interesantes. Trabajar en casa también tiene sus puntos negativos, que comienzan en la disminución de las relaciones interpersonales y pueden terminar inclusive en depresión. Existen casos en los cuales personas entraron en depresión por que no tenían con quien conversar durante la jornada de trabajo. Hay quien reclame de estar solo y muy dependiente de la tecnología, por esta razón el teletrabajo no es recomendado para quien tiene tendencia a deprimirse.
La creencia de que el trabajo en casa es algo negativo y opuesto al profesionalismo aún está presente en Brasil. Algunas empresas prefieren no decir que sus empleados trabajan en casa, pues creen que esta situación pueda manchar la imagen y reputación delante de sus clientes.
El Instituto Brasileño de Geografía y Estadística informa que la clase media brasileña ya es de 52% de la población de Brasil, siendo que en 2008 era de 46%, esto provoca un aumento en la compra de carros, pues en 2009 fueron vendidos 3 millones y 100 mil carros, y en el 2008 fue de 200 mil a menos, provocando grandes congestionamientos en ciudades capitales brasileñas, siendo un caso crítico el de São Paulo, donde todos los días entran en sus calles 900 carros, mientras que nacimientos diarios son 850, o sea, “nacen” más autos que personas y estudios dicen que en 2015 llegará al colapso, pues en este año no se podrá ni siquiera colocar el carro en la calle o avenida, quiere decir que la ciudad puede parar, inclusive Rio de Janeiro, Belo Horizonte, Porto Alegre podrían parar en 10 años en el primer caso y en 15 en los otros.
Es importante resaltar que en São Paulo ya se pasan 22 días por año en los ómnibus, el congestionamiento ya llegó a 266 kilómetros (sumando todos los puntos de la ciudad), en el horario de punta el transporte colectivo llega a andar a 11 kilómetros por hora y los carros a 17 kilómetros en el mismo período de tiempo, sin contar con las lluvias, que este caso el tránsito se vuelve más lento, casi parando. Claro está que con esta situación la Sobratt y el autor entienden que el teletrabajo sería una buena solución, pues así habría menos accidentes de tránsito, menos muertes, menos construcción de túneles, puentes y metro, que no es de interés de las constructoras de infraestructura y de las fábricas de carros.
El empresario brasileño no está acostumbrado a fiscalizar el empleado a la distancia, habiendo actualmente tecnología para controlarlo, inclusive existen softwares que registran hasta cuantas teclas el empleado toco en el teclado. Desgraciadamente, la falta de una legislación específica que de reglas al teletrabajo en Brasil también es un punto negativo, si bien que existen dos proyectos de ley relacionados, como el 3129/04 que redefine el artículo 6º de la Consolidación de las Leyes del Trabajo (CLT) que trata el trabajo a distancia añadiendo que también se puede hacer con tecnologías de la comunicación y telecomunicación y nada más, ya el 4505/08 se intenta dar reglas al teletrabajo, pero se olvida del teletrabajador autónomo.
El problema está también en los jueces laborales brasileños que en su mayoría no están actualizados en tecnologías de telecomunicación e internet, existiendo aún magistrados que hacen sus sentencias a mano y los empleados públicos las digitan, pero felizmente existen ejemplos buenos, como el juez laboral Firmo Leal de la ciudad de Ipiáu en el interior del Estado de Bahía, donde él habla y la máquina digita la sentencia y usa la internet el tiempo entero para informarse y actualizarse, ver televisión y escuchar radio. Felizmente, la situación está para cambiar, pues existen 3 juzgados laborales virtuales en la ciudad de Curitiba, capital del Estado de Paraná y van a abrir más, tanto que ya existe el gabinete virtual, embargos virtuales, donde ya se pueden bloquear cuentas bancarias en cualquier lugar de Brasil y hasta veículos y bienes inmuebles, en estos dos últimos casos se bloquea el registro.
El Tribunal Regional del Trabajo del Estado de Minas Gerais fué el primero en crear jurisprudencia sobre teletrabajo, fué en el 17 de diciembre del 2009 y es como sigue:
EMENTA: RELAÇÃO DE EMPREGO. A prestação de serviços na residência do empregado não constitui empecilho ao reconhecimento da relação de emprego, quando presentes os pressupostos exigidos pelo artigo 3º da CLT, visto que a hipótese apenas evidencia trabalho em domicílio. Aliás, considerando que a empresa forneceu equipamentos para o desenvolvimento da atividade, como linha telefônica, computador, impressora e móveis, considero caracterizada hipótese de teletrabalho, visto que o ajuste envolvia execução de atividade especializada com o auxílio da informática e da telecomunicação.
En este caso, el artículo 3º de la Consolidación de las Leyes del Trabajo define qué es el empleado, como un trabajador sujeto a subordinación, consecuentemente habrá relación de empleo, independientemente si es a distancia o no, o usando internet o radio. Es importante señalar que el juez laboral brasileño no quiere saber si hay teletrabajo o no, lo más importante es saber si existe relación de empleo para dar los derechos laborales respectivos. Es importante decir que en esta decisión judicial el teletrabajador ganó y en 22 de marzo de este año fue ejecutada pues la empresa cuando supo que su recurso no cambió la sentencia, decidió no recorrer nuevamente.
*Graduado en Derecho en la Universidad de São Paulo (USP) - Máster en Derecho por la Universidad Federal do Rio Grande do Sul (UFRGS) - Director de Relaciones Académicas de la Sociedad Brasileña de Teletrabajo y Teleactividades (SOBRATT) - Autor del libro “Análise Juslaboral do Teletrabalho” - Profesor de Derecho Informático y Derecho Laboral en Salvador – Brasil
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